Lecciones bálticas para el frío polar

En enero la ola de frío ártico ha golpeado duro a Europa. En algunas partes de la región báltica han llegado hasta -31° bajo cero.

La región Báltica recibe con frecuencia estas olas de frío polar en invierno y por aquí se lo toman con algo más de naturalidad. La clave, dicen, es estar preparado para enfrentarlo.

A pesar de ser un latinoamericano que viene de las altas montañas andinas, no me considero «estar preparado» para temperaturas de 25 o 30 grados bajo cero, ni de cerca. Busqué en internet y encontré poca información en castellano (los escandinavos, por ejemplo, lo tienen todo muy preciso y dispuesto), así que aquí les relato algunos claves de lo que veo y vivo en Letonia.

Es inconcebible sobrevivir este invierno sin algún sistema de calefacción, todas las casas, galerías comerciales, oficinas y empresas tienen uno, las construcciones más nuevas a gas y mucho más eficientes que las antiguas (la mayoría) a carbón con fogón centralizado en el edificio mientras que el campo casi todo depende de leña y carbón. El gas y el carbón son importados (normalmente de Rusia), por lo que son muy caros así que de cualquier manera uno tiene que ahorrar porque la factura del gas, la electricidad o la calefacción puede ser exorbitante.

Pero hay que salir a la calle, por lo que ropa adecuada es crucial. La ropa interior térmica es lo primero. Como en todo, hay de muchos precios, pero lo mejor son las sintéticas de fibra (el algodón no sirve a partir de -10º bajo cero). Es mejor que la ropa interior térmica sea de cuello a tobillos.

Winter coats. Vea más fotos del invierno.

Asumiendo como obvio pantalones, calcetines y sueters de lana, un detalle muy importante es el gorro y los guantes. Las fibras naturales son buenas (aquí uso casi a diario un grueso sombrero de alpaca pura), pero mucho mejor que tenga forro. Gorros y guantes de al menos 40 grs (mejor 60grs) de material es una buena inversión, aunque también son buenos los de cuero de una sola pieza con piel natural adentro.

Aprender a cubrirse con la bufanda es lo que quizá no se toma en cuenta y se debe. El frío penetra por cada espacio posible, así que hay que envolverse el cuello con una buena bufanda larga correctamente, esto es desde el pecho hacia arriba y de vuelta hacia el pecho.

Zapatos apropiados son algo que hace la diferencia. Los zapatos deben ser a prueba de agua porque la nieve se derrite muy rápido al contacto o cuando uno entra a un lugar caliente, evitar los pies húmedos es vital. En lo personal no uso calcetines de lana sino zapatos con una capa aislante en la suela, los compré hace tres inviernos todavía tienen cuerda.

El abrigo es también muy importante, mientras más largo y compacto mejor, si tiene forro, pues será muy útil. El problema es que los precios de los buenos pueden ser de tres o hasta cuatro ceros.

En otra oportunidad comento más sobre bebidas calientes, espirituosas y otras magias, eso sí, lo principal es tratar de mantener el buen humor.

la Cadena Báltica

texto original en www.pabloarivero.com

Alrededor de 1.5 millones de personas de Estonia, Letonia y Lituania, los tres países bálticos, se tomaron las manos  el 23 de agosto de 1989 y formaron una cadena humana de 600 kilómetros de longitud, como acto de protesta y demanda de independencia frente a la ocupación soviética.

Este evento se recuerda como la Cadena Báltica (en estonio, Balti kett, en letón Baltijas ceļš, en lituano Baltijos Kelias).

Baltic-Way-Human-Chain-independence

El impacto de la protesta pacífica fue decisivo, atrajo la atención de la prensa y comunidad internacionales, y allanó el camino hacia independencia de los estados bálticos en 1991. La Cadena Báltica se realizó en conmemoración a los 50 años del tratado secreto [en] entre los ministros de Exteriores de la URSS y la Alemania Nazi, Vyacheslav Molotov y Joachim von Ribbentrop respectivamente, firmado el 23 de agosto de 1939 en Moscú, a través del cual se pactó la no agresión mutua y la ocupación de los países bálticos, días antes de la invasión alemana a Polonia que marca el comienzo de la Segunda Guerra Mundial.

Cadena Báltica fue un acto ciudadano convocado bajo un régimen autoritario que se desmoronaba, utilizó los limitados recursos comunicacionales de la época y el contexto, nada comparables a los disponibles hoy en día, y representa, junto a otros eventos como por ejemplo las barricadas de Riga, un pilar fundamental en la historia contemporánea  de la región.

Las fotos del acto de conmemoración realizado hoy en Riga (todo el set aquí):